En una reciente entrevista con la revista Trial de la Asociación Americana de Justicia (AAJ), una socia fundadora de Arias Sanguinetti compartió su amplio conocimiento sobre los vehículos autónomos, que están transformando los campos legales y automotrices.
Una abogada de lesiones personales de Los Ángeles y líder de la industria con años de experiencia en tecnología autónoma, Elise Sanguinetti ofrece una profunda inmersión en los desafíos, riesgos y preguntas legales en evolución asociadas con estas innovaciones.
Comprendiendo la Evolución de los Vehículos Autónomos
A medida que la tecnología de vehículos autónomos avanza rápidamente, es esencial comprender los diferentes niveles de autonomía que ya están en la carretera.
Elise explica que la Sociedad de Ingenieros Automotrices clasifica los vehículos en niveles que van desde 0 (sin autonomía) hasta 5 (totalmente autónomo).
Para muchas personas, los sistemas de asistencia al conductor que se encuentran en los automóviles modernos son familiares, como las características de prevención de accidentes, frenado automático y asistencia de mantenimiento de carril. Estos sistemas, que se encuentran en los niveles 1 y 2, se consideran formas básicas de asistencia diseñadas para apoyar al conductor sin tomar el control por completo.
Sin embargo, los sistemas de nivel superior, como el Autopilot de Tesla, el BlueCruise de Ford y el Super Cruise de Cadillac, están empujando los límites de lo que es posible. Estos sistemas van más allá de la simple asistencia, permitiendo que el vehículo tome un control parcial, pero se espera que el conductor permanezca alerta y listo para intervenir si es necesario.
Los niveles 3, 4 y 5 incluyen automóviles que operan cada vez más de manera autónoma. Si bien el cambio hacia vehículos totalmente autónomos puede eventualmente eliminar la necesidad de un conductor humano, también conlleva desafíos únicos tanto en la tecnología en sí como en cómo se regula.
Los Riesgos de los Sistemas de Asistencia al Conductor
Un problema crítico que Elise destaca es el riesgo que plantea la dependencia excesiva de los sistemas de asistencia al conductor. Si bien estas tecnologías están diseñadas para mejorar la seguridad y la comodidad, pueden llevar a situaciones peligrosas si los conductores se desvinculan o dependen demasiado de ellas.
Por ejemplo, el frenado fantasma, donde un vehículo frena repentinamente debido a una lectura falsa de sus sensores, puede provocar colisiones traseras. De manera similar, las características de asistencia de carril a veces pueden hacer que el vehículo corrija en exceso, lo que lleva a que los conductores reaccionen de maneras que aumentan el riesgo de un accidente.
En su práctica, Elise ha visto de primera mano cómo estos sistemas pueden fallar, lo que resulta en accidentes que podrían haberse evitado con una mejor participación del conductor o una tecnología más confiable. La combinación de supervisión humana y control automatizado puede ser peligrosa, especialmente cuando el conductor no se mantiene alerta o interviene en un momento crítico.
Cómo los Fabricantes de Vehículos Autónomos Pueden Mejorar la Seguridad
Elise también profundiza en la responsabilidad de los fabricantes de diseñar sistemas que mantengan a los conductores comprometidos y listos para tomar el control cuando sea necesario. Si bien algunos vehículos están equipados con cámaras interiores para monitorear la atención del conductor, señala que estos sistemas no siempre son efectivos.
Los fabricantes deben asegurarse de que sus automóviles incluyan recordatorios claros y accionables para mantener a los conductores alerta, lo que Elise cree que actualmente falta en muchos vehículos en el mercado.
Los reguladores están comenzando a tomar medidas en respuesta a estas preocupaciones. Por ejemplo, en diciembre de 2023, la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA) requirió que Tesla emitiera un retiro debido a una supervisión insuficiente del conductor.
A pesar de estas medidas, Elise enfatiza que se debe hacer más para garantizar que las tecnologías de vehículos autónomos cumplan con sus promesas de seguridad.
Comprobando la Responsabilidad en Accidentes de Vehículos Autónomos
Comprobar la responsabilidad en accidentes que involucran vehículos totalmente autónomos es altamente complejo. La gran cantidad de datos generados por estos vehículos, que van desde imágenes de video hasta lecturas detalladas de sensores, puede proporcionar información sobre lo que salió mal.
Sin embargo, acceder a esta información puede ser difícil, especialmente cuando los fabricantes son reacios a compartirla.
Elise representa actualmente a un cliente que estuvo involucrado en un choque con un vehículo totalmente autónomo. Destaca que el desafío a menudo no radica en probar la culpa, sino en comprender la gran cantidad de datos generados durante el accidente.