El término “responsabilidad por productos” cubre una variedad de situaciones. En algunos casos, las personas pueden resultar heridas por productos defectuosos como medicamentos farmacéuticos y dispositivos médicos. En otras situaciones, la lesión podría provenir de un producto defectuoso vendido a través de una cadena de distribuidores para uso doméstico. Por ejemplo, una caldera defectuosa podría explotar e herir a los residentes de un edificio de apartamentos, creando responsabilidad por productos para el fabricante, distribuidor y vendedor.
Todas aquellas personas o empresas en la cadena de distribución pueden tener potencialmente responsabilidad por productos hacia una persona que haya sido herida por un producto defectuoso. La lista de posibles demandados en una demanda por responsabilidad por productos incluye:
- El fabricante de cualquier pieza componente del producto
- El fabricante que ensambló las piezas componentes en el producto defectuoso
- El primer distribuidor o mayorista del producto
- El siguiente comprador y revendedor del producto
- Todos los vendedores posteriores, incluyendo la tienda minorista que finalmente vendió el producto defectuoso al consumidor
Estas personas o empresas pueden tener responsabilidad por productos hacia el consumidor final del producto, ya sea que esa persona haya comprado el producto de ellos, o haya recibido el producto como una venta, préstamo o regalo de otra persona. Un abogado experimentado de lesiones personales en Los Ángeles sabe cómo utilizar la ley de responsabilidad por productos para demandar a todas las partes que puedan ser legalmente responsables del producto defectuoso.
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La responsabilidad por productos entra en juego en las demandas colectivas porque un producto, como un medicamento o dispositivo médico defectuoso, puede haber herido a miles de consumidores. Hay muchas teorías posibles de responsabilidad. Por ejemplo, los abogados de demandas colectivas y responsabilidad por productos a veces se refieren a instrucciones o advertencias inadecuadas como “defectos de marketing” que llevan a la responsabilidad por productos. Los defectos de marketing son básicamente fallas en la forma en que se comercializa un producto defectuoso. Esto puede incluir:
- Etiquetado inadecuado
- Instrucciones insuficientes
- Advertencias de seguridad inadecuadas o falta de advertir a los consumidores sobre los peligros ocultos de un producto
- Una representación negligente o incluso intencional con respecto a un producto
En estos casos, el abogado de responsabilidad por productos intentará demostrar que el fabricante sabía o debería haber sabido que el producto probablemente lesionaría al consumidor, pero no obstante no advirtió adecuadamente al consumidor sobre el problema.
Los casos de responsabilidad del producto que involucran dispositivos médicos defectuosos o peligrosos han incluido:
- Electrodomésticos
- Equipos
- Trasplantes de órganos
- Dispositivos protésicos
- Implantes quirúrgicos
- Equipos quirúrgicos
- Suministros hospitalarios
- Equipos de diagnóstico
- Aparatos auditivos
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